El mojado acaudalado

El otro día escuché en un programa de radio una norteamericana con la intención (en sentido hipotetico) de mandar una carta al presidente Calderón para exigir que se le otorgaran –luego de haberse internado ilegalmente al país y conseguir trabajo- licencia de manejar, papeles para trabajar legal, seguro medico, que las instituciones hablaran ingles para atender todas sus demandas y que en las escuelas dieran una pequeña sintesis de la historia de estados unidos. Desde luego todos se le echaron encima y le reclamaron su sentimiento antimigrante, pero lo que realmente deberiamos de preguntarnos es por qué nos gusta quebrar las leyes de otros paises y las leyes del nuestro, pero nos molestan que alguien mas lo haga, por eso tratamos tan mal a nuestros vecinos del sur y les bajamos toda la poca lana que traen e incluso aqui en el norte vemos mal que nos gane el trabajo un veracruzano, alguien de torreón o del DF, la verdad es que aqui y con todo mundo somos unos hijos de la chingada pero que a nosotros nos respeten en un país extranjero, nuestro descaro no tiene límites, reclamamos que los perredistas entorpezcan el trafico y "secuestren" a la ciudad de México, pero estamos encantando viendo marchas en los estados unidos a favor de personas que quebrantaron la ley e incluso apoyamos el hecho de que no trabajen para colapsar la economía del país que les brinda la oportunidad que no encontraron en el suyo. Desde luego los gringos no van a devolver a millones de indocumentados que diariamente se parten la cara para mantenernos por medio de las remesas, desde luego los de acá nunca vamos a entender que solo vemos la paja en el ojo ajeno y no la viga en el nuestro.